martes, 26 de abril de 2016

Introducción y características de las personas con discapacidad auditiva

La discapacidad auditiva es el trastorno sensorial caracterizado por la pérdida de la capacidad de recepción de las formas acústicas, ya sea por una alteración del órgano de la audición o bien de la vía auditiva.
En este apartado debemos realizar una diferenciación entre sordera e hipoacusia:

  • SORDERA: Una persona sorda es aquella cuya agudeza auditiva le impide aprender su propia lengua, seguir con aprovechamiento las enseñanzas básicas y participar de las actividades normales de su edad.
  • HIPOACUSIA: Una persona hipoacúsica es aquella cuyo resto auditivo (con o sin ayudas complementarias) le es funcional para su vida diaria, por lo que, generalmente, permite la adquisición del lenguaje.
Los tipos de discapacidad auditiva que podemos encontrar son:

  1. Según el momento de aparición: prelocutiva (de 0 a 2 años), perilocutiva (de 2 a 3 años) o postlocutiva.
  2. Según la localización de la lesión: oído medio o externo (obstrucción que afecta a la progresión del sonido, afectando al aspecto cuantitativo) u oído interno (problemas en las vías de acceso al cerebro, y suelen afectar a la calidad del sonido).
A continuación vamos a realizar una clasificación de la discapacidad auditiva según la intensidad:

  1. Audición infranormal: no sobrepasa los 20 dB.
  2. Deficiencia auditiva ligera o leve: de 21 a 40 dB.
  3. Deficiencia auditiva media o moderada: de 41 a 70 dB.
  4. Deficiencia auditiva severa: de 71 a 90 dB.
  5. Deficiencia auditiva profunda: de 91 a 119 dB.
  6. Deficiencia auditiva total o Cofosis: más de 120 dB.
Existen numerosas ayudas que pueden mejorar nuestra audición, como pueden ser los audífonos, los equipos de frecuencia modulada o los implantes.
Conviene hacer mención a las diferentes características que suelen presentar las personas que padecen deficiencia auditiva. Estas son:

  1. A nivel cognitivo, puede existir un mayor retraso en la inteligencia abstracta, déficit atencional, dificultad para anticipar situaciones o dificultas para la comprensión de actividades regladas y complejas.
  2. A nivel socioafectivo, puede existir dificultad de relación con el mundo exterior, tener una actitud irritable y agresiva y tener mayor expresividad y aumento de las gesticulaciones.
  3. A nivel motriz, menor capacidad de velocidad de reacción, desequilibrio en la estructuración espacio-temporal, dificultad para la apreciación del ritmo, alteraciones del equilibrio estático y dinámico, problemas en la coordinación locomotora, problemas en el control postural o problemas de lateralidad.
Existen numerosos beneficios de la actividad físico-deportiva en estas personas, tanto para mejorar a nivel social y psicológico, como para hacerlo motrizmente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario